En Anku Coffee Project, nuestro compromiso va más allá de la compra de café; construimos relaciones sólidas y de confianza con cada uno de nuestros productores aliados. Creemos que detrás de cada grano hay una historia y una familia que merece ser valorada. Por eso, mantenemos una comunicación constante con Sofía, Celio y Samuel, visitando sus parcelas, conociendo de cerca sus procesos y escuchando sus necesidades.
Nuestro objetivo es acompañarlos en cada etapa, brindándoles soporte y asegurándonos de que cuenten con las condiciones adecuadas para producir cafés de calidad excepcional. En Anku Coffee Project valoramos el esfuerzo, la pasión y el conocimiento de quienes hacen posible este proyecto, trabajando juntos para promover un café sostenible, justo y con identidad.
Sofía es una productora de café apasionada y dedicada, reconocida por su entusiasmo y esfuerzo constante por ofrecer granos de excelente calidad.
Cultiva con esmero en su parcela ubicada a 2,050 metros sobre el nivel del mar, un entorno privilegiado que aporta características únicas a su café.
Sofía cuida cada detalle del proceso, desde la siembra hasta la cosecha, motivada por su compromiso con la calidad y el amor por el café. Su entusiasmo se refleja en cada taza, llevando a sus clientes una experiencia aromática y de sabor auténtico, fruto de su trabajo empeñoso y su conexión con la tierra.
Celio es un productor de café responsable, comprometido y profundamente apasionado por su labor. Cultiva con dedicación en su parcela ubicada a 2,060 metros sobre el nivel del mar, una altitud ideal que permite obtener granos de excelente calidad.
Celio se caracteriza por su disciplina y respeto por cada etapa del cultivo, desde el cuidado de las plantas hasta el procesamiento del café. Su pasión por el café se refleja en su constante búsqueda de mejorar y ofrecer un producto que destaque por su aroma, sabor y personalidad.
Para Celio, producir café no es solo un trabajo, sino una vocación que honra día a día en su parcela de altura.
Samuel es un productor de café con una vasta experiencia y una trayectoria que lo respalda como conocedor del buen café. A lo largo de los años, ha perfeccionado su técnica y cultivado una profunda dedicación por su labor.
En su parcela, ubicada a 1,600 metros sobre el nivel del mar, Samuel se especializa en la variedades de alta calidad, reconocida mundialmente por su delicado perfil aromático y exquisito sabor.
Gracias a su conocimiento y compromiso, Samuel cuida con esmero cada detalle del proceso productivo, asegurando que cada grano refleje la calidad y excelencia que lo distinguen. Su pasión por el café trasciende generaciones y se hace presente en cada taza que nace de su cosecha.